Capítulo 39

 

Jaime mira a Emilio divertido. Le da le pecho que se le cayó y con ironia le dice:

--venga, Gracita... ¿de donde salio ese nombre...? Gracia. ¿no se te ocurrio otro mejor...?

Emilio agacha la cabeza.

--ya olvida esa tonteria... vamos... --Jaime cariñoso.

--a donde? 

Jaime le guiña el ojo.

--a mi piso No quieres que nos acostemos?

Emilio lo mira de arriba a abajo. Lo recuerda desnudo y le parece un sueño. Casi le da un infarto.

--¿hablas en serio?

Jaime saca algo de un bolsillo: es un preservativo. Lo mira pícaro.

--¿y tú que crees?

Cuando están los dos desnudos frente a frente...  Emilio no se puede creer lo que le está pasando. No se lo piensa. Sabe a lo que va y tiene prisa no sea que sea un sueño y todo acabe. Así que se arrodilla y goza. Luego van a la cama. Jaime es una bestia en celo. Emilio se siente en el cielo. Los dos chicos caen en la cama resoplando y jadeando. Emilio se retuerce de placer, está en shock,

--¡¡ha sido genial¡¡ha sido genial¡¡ha sido genial¡¡ --no deja de repetir.

En cualquier momento espera despertar y darse cuenta que nada de eso ha sido verdad. Se quiere pegar a Jaime, siempre soñó con hacer el amor con alguien que le gustase tanto como Jaime y pasar la noche abrazado a él pero esa parte del sueño no se le cumple. Jaime se levanta totalmente desnudo y se empieza a vestir muy de prisa.

--¿porque te vistes?

--bueno... ya lo hicimos... ¿es que no has tenido bastante?

--si pero...

Jaime lo calla:

--venga que te llevo a tu casa...

Jaime es demasiado frio con él. Emilio ha echado de menos las palabras bonitas. Emilio no las dice porque le da vergüenza. Se viste un poco decepcionado. Jaime lo lleva en su coche.  No le dice nada. De hecho ni lo mira. Emilio esta feliz porque tampoco se atreve a decirle nada. Lo mira fascinado.  Le mira el gordo bulto de los tejanos y le parece mentira que haya gozado de ese cuerpo que tanto le gusta.

--¿es aquí? --le pregunta Jaime al llegar a la casa de Emilio.

Éste se lo queda mirando. Espera un beso de despedida, algo.

--bueno... nos vemos ¿no? --dice Jaime un poco frio.

Emilio se lo queda mirando.

--¿quieres algo? --Jaime.

--bueno... ¿cuando nos vemos?

--pues mañana en el gimnasio,...

--¿y volveremos a salir?

--si tú quieres y yo no tengo otro plan... claro...

--¡¡no, no... yo tendré otro plan¡¡ --dice Emilio ansioso.

Jaime le sonrie y Emilio se queda tranquilo de que ya no sea tan frio. Sale del coche más tranquilo. Se iba a girar para salir algo más pero Jaime ya desaparece de su vista como si hubiera sido un sueño pero Emilio sonrie excitado.  Tiene el aroma del hombre en su piel.

--¡¡fue real... claro que fue real¡¡

Piensa en Axel.

--¡¡ya no te tengo envidia¡¡ya no¡¡mi novio no tiene nada que envidiar al tuyo¡¡¡el mío es más guapo¡

Entra en su casa con una sonrisa de oreja a oreja. Y se encuentra con su padre. La sonrisa se le borra de golpe. Tiene miedo que descubra lo que pasa.

--¿y esa sonrisa? ¿tu has estado con una hembra?¿eh, mi macho?

Emilio sonrie timidamente. Emilio padre lo mira con complicidad:

--¡¡y es que así somos los hombres de esta familia... machos machos¡¡¿¿y como estaba la hembra?¿¿bien buena?

--y tanto --dice Emilio nervioso.

--¡¡ese es mi macho¡¡ --dice Emilio padre con orgullo.

Al dia siguiente, Axel y Valerio desayunan juntos.

--¿estás mejor? --Axel.

--claro... ¿porque no iba a estar bien?

--no sé... aunque digas que no yo sé que te duele no tener un hijo y piensas más lo de tu hijo no nacido...

Valerio agarra la servilleta con cierta rabia:

--¿ves porque no te lo dije?  ¡¡En mala hora lo descubriste¡¡

--no digas eso... soy tu pareja, yo quiero ser parte de ti cómo tú lo eres de mi. Lo quiero saber todo de ti.

Valerio le toma la mano tratando de calmarse:

--pero es que es algo muy doloroso de mi pasado y no me gusta estar hablando de eso a cada rato... Yo estoy bien y no se habla más de este tema...

--Yo sé que sí te preocupa, no hicimos el amor...

--es que me dolia la cabeza...

Axel se levanta y lo abraza:

--eso es una tonteria, ni que fueras una vieja... Yo te conozco y sé que eso te atormenta...

--Lo que me atormenta no es el hecho en si sino el que tú no hagas más que hablar de eso, no pienses más en eso, nos harás daño...

--porque...?

--Más bien piensa en nuestra boda... He hablado con un amigo mio del registro civil como ya tenemos todos los papeles listo nos podemos casar en los próximos días si tenemos sitio...

Axel sonrie enamorado:

--¡¡sí, sí, casarnos cuanto antes¡¡¡sí... yo estoy seguro que Kira nos ayudará¡¡

Valerio le sonrie. Le gusta que haya olvidado el tema del hijo y ahora se concentre solo en la boda.

--¿que te parece si la llamas y vamos a verla?

--la voy a despertar pero con lo ilusionada que está con la boda seguro que dice que sí...

Los enamorados se besan y Axel corre ilusionado a buscar el número de teléfono de Kira.

Emilio sale de su casa a media mañana. Se sorprende cuando ve a su hermano. Axel lo saluda con cariño. Emilio lo recibe muy frio.

--¿¿que haces aquí?

--tenia ganas de verte... anoche me quedé preocupado...

--¡¡yo no necesito que te preocupes de mi vida y no quiero que me busques un lio con papá¡

--el lio con el viejo lo vas a tener si se entera de lo anoche...

Emilio se pone nervioso.

--¿¿que es lo que te está pasando, Emilio?

Emilio responde muy agresivo:

--¡¡no te metas en mi vida...¡¡

--yo te quiero ayudar...

--¡¡yo no necesito de ti¡¡

Emilio se iba a ir pero Axel lo llama con desesperación:

--no te vayas hermano.

Emilio se gira molesto y dice:

--¿¿que es lo que quieres?

--sólo quería que supieras que hemos hablado con tu amiga Kira y Valerio y yo nos casamos en 10 días... Va a ser algo muy sencillo pero me gustaría que me acompañaras...

Emilio no lo duda:

--¡¡sí, claro que te acompaño y no lo haré, sólo... vendré con mi novio¡¡

Axel sonrie, se alegra por su hermano que más que feliz está desafiante.

--¡¡Emilio, que bueno¡¡por fin... que ganas de conocer a tu novio...

Axel está feliz por Emilio, se alegra por él aunque Emilio cree que es por compromiso.

--¡¡te vas a morir de la envidia, porque mi novio es todo un fuertote y el tuyo es muy enclente¡¡ahora eres tú el que me vas a envidiar a mi¡¡ --piensa Emilio.

Y mientras Emilio le sonrie con rencor, Axel lo hace con cariño.